Manifestación contra esa barbaridad

Me voy, como no podía ser menos, a la manifestación contra la «reforma laboral». Así cualquiera reforma. Es como si decimos que hay que regular las tiendas de ropa, y las hacemos desaparecer todas. ¿Y qué? Se acabaron las tiendas de ropa, pero nos quedamos todos desnudos.

Es como si queremos erradicar la adulteración en los alimentos. Prohibimos comer, y así morimos de otra cosa, pero nunca de intoxicación. Estupendo. Todos muertos de hambre, pero con los estómagos vírgenes.

«Hola, soy el nuevo gobierno, y remato la actuación del anterior, que continuaba lo malo del anterior al anterior…». ¿

Estarán orgullosos?

Lo peor es que, si nos remontamos, llegamos hasta los defectos que ya conocíamos del franquismo. Eso pasa (como oía yo en desde pequeña), por no haberle pegado un tajo al pasado. Qué país, que todavía la familia de Franco sigue campando por sus derechos en la prensa rosa….¡yo me parto! Perdón, «me mondo», como dice  el casposo presidente cuyo nombre ni me invito a pronunciar.

Adióóóóóóóóóóóós! Que una, por ir a una manifestación, no tiene por qué ir hecha un adefesio, jajajaja…me voy a preparar pa ir decente, y, como siempre, voy con retraso.

Llevo la cámara, claro…ya os martirizaré con las fotos. Por cierto, qué difícil es fotografiar manifetaciones, y mogollones en general. No hay como las fotos de uno en uno y sin masa de fondo, humana, forestal o marina, da igual. Es fastidiao, eh?

Acerca de mividadelosotros

Repugnada por el periodismo masticable.
Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario